El término “commodities” es utilizado tradicionalmente para referirse a productos básicos, asimilándose al de “materia prima”, aunque incluye también productos semielaborados que sirven como base para procesos industriales más complejos.
Los productos “commodities” no son diferenciados por la marca, no generan un valor adicional al cliente, es decir no tienen un valor agregado. Suele utilizarse la expresión «es una “commodity”» cuando se está analizando el precio de un producto o servicio, ya que su precio, es un valor universal al no depender de variaciones que agreguen o quiten valor. Estas “commodities” pueden ser locales, nacionales, o internacionales. Su desarrollo ha llegado a tal punto que tomamos como nuevas “commodities” a la hamburguesa “Big Mac” y al “iPod”.
Los precios al contado de las “commodities”, a diferencia del de los activos financieros, son el resultado de la actuación de la oferta y la demanda, no del valor presente de los flujos de caja futuros.
Las “commodities” son una nueva clase de activo por derecho propio. El flujo de dinero de inversores hacia estos productos se ha multiplicado en los últimos años y se espera que continúe esta tendencia en el futuro próximo. Las inversiones en “commodities” son aun relativamente pequeñas comparadas con el tamaño de los mercados financieros (solo suponen un 2% del volumen de productos estructurados), pero en la medida que los activos “tradicionales” empiezan a estar saturados…
¿Por qué usar “commodities”?
Las “commodities” en general ofrecen grandes ventajas para los inversores de cartera por diversas razones:
Estas características los convierten en el activo ideal para las carteras.
Ilustración 1: Evolución de commodities, bonos y acciones (1959-2004)
En todos los períodos se observa la correlación negativa de los bonos y el equity con las “commodities”, lo que refuerza la utilidad de las “commodities” a la hora de crear portfolios diversificados, y esta correlación negativa es tanto mayor cuanto mayor sea el horizonte de observación. Por el contrario, la inflación y las “commodities” están correlacionados positivamente, incrementándose también cuanto mayor es el plazo de observación. De esta forma, los movimientos en los precios de las “commodities” son un indicador adelantado de inflación.
En el siguiente post continuaré profundizando en la gestión del riesgo de las commodities.
¡Un cordial saludo!
Profesor de Dirección de Finanzas
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Fernando Pulido Soto
comento el día 01 de agosto a las 6:51 pm (#)
Buen dia Emilio,
bastante interesante este blog, en si las commodities se pueden considerar una buena inversion ya que siempre tendran un valor intrinseco (madera, pork bellys, lumber) en cambio las acciones de una empresa si pueden llegar a valer menos de 0. Muy util saber la correlacion entre comodities e inflacion, por lo mismo siempre aumentan de valor.
Saludos
Fernando